Del FIORASPHERECÓMO ADORAR EL AIRE LIBRE

Te encanta el aire libre. Pero a veces simplemente te deja boquiabierto.

La belleza. La luz. ¡El VIENTO! No permitas que una brisa fuerte arruine tu pícnic… o se lleve tus toallas de papel. Haz que la naturaleza sea tu portarrollos. Busca una rama con hojas, desliza el rollo y ¡voilà! La rama lo sostiene con firmeza y las hojas evitan que el viento vuele las toallas.

Tú adoras el aire libre. Pero hay una cosa que te molesta.

Los insectos. Están por todos lados. Y está bien. También es su hogar. Recuerda, hay maneras naturales para mantener a los insectos alejados. Es posible que te gusten las esencias de vinagre de manzana y de limón fresco. ¿A las hormigas? No tanto. Limpie una superficie para comer al aire libre con un spray o un exprimido de estos aromas. ¿Estás acampando? Remoje un pañuelo en el aroma y bloquee la pequeña abertura donde se unen las cremalleras de la tienda. Y tenga en cuenta que los mosquitos no adoran el encantador aroma de nuestro papel higiénico con aroma a lavanda.

Tú adoras el aire libre. Pero él no te adora a ti.

¿No detestas el amor no correspondido? Si las alergias son un problema (y lo son para muchos), es importante estar seguro de que tienes los medicamentos que puedas llegar a necesitar… y los pañuelos de papel FIORA® cuando salgas al aire libre. Lleva una caja de pañuelos de papel en la guantera o en el baúl. Y guarda algunos pañuelos de papel en tu bolsillo cuando vayas a abrazar un árbol.

Tú adoras el aire libre. Pero a veces parece que tienes que empacar para una semana.

Disfrutar del aire libre no debería significar llevar el interior contigo. Muchas de las cosas que llevas se pueden usar para más de una cosa. Los palitos chinos son livianos, finos y ocupan poco espacio. Come con ellos. Revuelve con ellos. Marca un sendero. Son fantásticos como palitos de batería. Y son buenos para encender fogatas. Aquí tienes otro truco para las fogatas: puedes usar los tubos de papel higiénico para encender una fogata. Llénalos con ramitas secas y cierra los lados. ¡Estarás asando malvaviscos en un abrir y cerrar de ojos!